Después de los incendios forestales que afectaron a Mallín Ahogado recientemente, en la provincia de Río Negro, un grupo de organizaciones y familias locales trabaja en la creación de un vivero de especies nativas. Quieren producir alrededor de 40.000 plantas al año para restaurar el bosque y recuperar el modo de vida de las comunidades afectadas.
La iniciativa también busca convertirse en una herramienta educativa para la región, con visitas escolares y actividades de concienciación ambiental, según informó a Diario RIO NEGRO Juan José Ochoa, quien es director de la Licenciatura en Agroecología de la Universidad Nacional de Río Negro y coordinador del semillero GLFx Bosques de Patagonia.